El artículo se propone apostar por un curriculum que alejándose de los modelos tradicionales incursiona en una apuesta que apunta a un modelo problemático–controversial. De esta forma, la propuesta es que el curriculum se aproxime a los temas emergentes y apremiantes que afectan a nuestra sociedad. En síntesis, el artículo profundiza en una postura crítica del curriculum para incorporar una mirada dilemática.
Palabras clave: currÍculum, controversialidad, criticidad.
O artigo propõe apostar por um currículo que diferente dos modelos tradicionais incursiona em uma aposta que aponta a um modelo problemático–controversial. Desta forma, a proposta é que o currículo se aproxime aos temas emergentes e urgentes que afetam a nossa sociedade. Em síntese, o artigo se aprofunda em uma postura crítica do currículo para incorporar uma mirada dilemática.
Palavras chave: currículo, controversialidade, criticidade.
This article proposes a curriculum that gets away from traditional patterns and moves towards a controversial-problematized model. The proposal is that the curriculum should approach the emerging and imperative issues that affect our society. In synthesis, the article delves into a critical stance of the curriculum in order to incorporate a dilemmatical view.
Keywords: curriculum, controversiality, criticality.
Es objetivo de este artículo hacer una propuesta curricular que se sustenta en torno a conocimientos controversiales y emergentes y que responde, por sobre todo, a los problemas y vicisitudes de todo orden que confrontan nuestros países, comunidades, localidades e instituciones educacionales. En otras palabras, lo que se pretende en este artículo es desafiar al currículum para que, en el ejercicio de su misión, se aproxime al acontecer de las sociedades en que se desenvuelve, a sus contextos y vicisitudes. Que se comprenda con mayor claridad que el currículum no es un constructo neutro, como piensan algunos. Por el contrario, tiene un mensaje político-transformador-emancipador que entregar. Que asuma los problemas que aquejan a nuestras sociedades en el momento presente y que, posiblemente, se agudizarán aún más en el futuro.
En el desarrollo del currículum escolar se han propuesto modelos de diseños curriculares diversos, sostenidos por concepciones e ideologías que las sustentan: currículum académico, de eficiencia social, centrado en el alumno, recontruccionista social (Schiro,1978); currículum de racionalidad técnica, perspectiva crítica y como praxis (Magendzo, 2003); currículum con enfoque técnico, deliberativo, sociocrítico (Díaz-Barriga, 2003).
La propuesta que estamos haciendo se justifica como un imperativo epocal, toda vez que se están operando transformaciones políticas, económicas, sociales, culturales y tecnológicas profundas, en que la información circula a una velocidad y por espacios nunca antes imaginados; los escenarios de futuro son cada vez menos predecibles y el conocimiento está sometido a diversas y variadas interpretaciones.
Además, en este momento estamos enfrentado mundialmente una pandemia que cuestiona irremediablemente muchos aspectos del quehacer humano, entre ellos a la educación y su currículum. Pareciera que, en un contexto inestable, impredecible, fluctuante, un currículum escolar que se sostiene sobre conocimientos homogéneos y uniformes, estáticos e invariables, sobre verdades inapelables, distante de los intereses de los estudiantes y alejado de las problemáticas que experimentan los países, es cuestionable y requiere impostergablemente ser repensado.
Un aspecto adicional que deseamos considerar en este artículo es que el currículum ha sido escasamente cuestionado desde una perspectiva latinoamericana. No podemos olvidar que a partir de sus orígenes el campo curricular ha tenido una impronta anglosajona, que hemos aceptado, en muchas ocasiones, acríticamente. Hemos admitido conscientemente —o quizás inconscientemente— la racionalidad instrumental, funcionalista, conductista, el isomorfismo curricular o currículum mundial, sin mayor reflexión y deliberación. Hay algunas excepciones, pero son escasas. Entre éstas podemos mencionar a Freire y a algunos especialista y pedagogos críticos.
Pensamos que al diseñar un currículum controversial que reivindica los temas emergentes y problemáticos que afectan a nuestras sociedades, estamos,precisamente, rescatando e insertándonos en una visión latinoamericana del currículum. Nos estamos alejando de las concepciones academicistas, de eficiencia social y racionalidad instrumental para dar paso a un enfoque deliberativo y sociocrítico (Díaz-Barriga, 2003).
Nuestra propuesta consiste en incorporar al currículum temas emergentes/contingentes con una mirada controversial; temas que surgen permanentemente en nuestras sociedades; temas y problemáticas que son debatidos en diversos ámbitos y en instancias políticas, sociales y parlamentarias, en los medios de comunicación masiva; dialogados y polemizados en las familias, en reuniones formales e informales, en círculos de amigos, etcétera.
Se trata de temas que trascienden el espacio privado para instalarse con fuerza en la esfera pública y que, por lo general, suscitan controversias y tensiones. Piénsese, por ejemplo, en temas que nos desafían y nos inquietan, como la pobreza, la violencia, la corrupción, la impunidad, la segregación, las discriminaciones e intolerancias, la globalización, el terrorismo, el desarrollo tecnológico, el consumismo.
Otros temas surgen como resultado del devenir político, económico, social y cultural que nuestras sociedades experimentan, por ejemplo, la preocupación por el deterioro ambiental, las movilizaciones y protestas sociales, la delincuencia, el maltrato a las mujeres y los niños, los esfuerzos por mantener la paz interna y externa, la marginación y exclusión de los pueblos originarios, las migraciones e inmigraciones, los desplazamientos de las poblaciones rurales, etcétera. Hoy el tema de la pandemia está presente mundialmente. En el futuro surgirán, sin duda, otros temas y situaciones que comprometan el desarrollo de nuestras sociedades.
El currículum no puede ni debe eludir estos temas. Hacerlo significa desvirtuar su cometido ético-político-ciudadano. Es un desafío complejo y dificultoso que hasta ahora no parece haberse enfrentado. Observamos que el currículum:
Por el contrario, si el currículum asume estos temas revelaría que se está cumpliendo con la misión educativa de formar ciudadanos que tienen una palabra y un poder de decisión para influir e intervenir en las políticas públicas; ciudadanos compenetrados y comprometidos con los problemas contingentes que afectan a sus sociedades y comunidades; ciudadanos que están alertas y prontos a defender con decisión sus derechos y los de los demás, y que no son indiferentes a lo que sucede en su entorno.
Los temas controversiales son tópicos sobre los cuales no existe consenso, hay divergencias, desacuerdos. En el proceso de diseñar el currículum por lo general emergen desavenencias, dado que se ponen en juego intereses diferentes —a veces contrapuestos— en los que intervienen cuotas disimiles de poder y control sobre el conocimiento (Appel,1986).
En efecto, en el presente, en el diseño del currículum intervienen como nunca antes una diversidad de actores, agentes y agencias, cada uno de los cuales aporta su perspectiva, su posición ideológica, sus intereses y visiones. En otras palabras, existe, por así decir, una heterogeneidad de percepciones, valores, concepciones ideológicas y poderes frente a la cultura seleccionada (currículum), los que, en ocasiones, son opuestos y controversiales.
Ahora bien, hacer una propuesta curricular en una perspectiva controversial significa vincularlo plenamente con la teoría curricular crítica, la cual sostiene que el currículum es construido históricamente y cuyos actores reconstruyen los conocimientos, reproducen las relaciones sociales y reinterpretan las normas de la sociedad en la cual están insertos. El modelo deliberativo y dialógico que caracteriza a la controversia se plantea como herramienta de liberación y emancipación a la que han contribuido una serie de autores, tanto anglosajones como latinoamericanos (Freire, 1985; Pinto, 2008; Ferrada, 2002, entre otros).
En términos más operativos, la propuesta de un currículum controversial que rescata los temas emergentes desde una concepción crítica requiere, impostergablemente, repensar los contenidos programáticos de cada una de las disciplinas de estudio e identificar los espacios en que el conocimiento curricular de éstas se entrelaza y confluye. Por sobre todo, exige identificar aquellos conocimientos disciplinarios que se vinculan con los problemas que la sociedad y las comunidades confrontan y con los intereses de los estudiantes y sus problemáticas.
Se puede afirmar que muchos de los contenidos disciplinarios que conforman el currículum pueden ser planteados de manera controversial:
Incorporar la controversialidad de manera transversal en todas las asignaturas del curriculum es un desafío que hay que asumir si se desea contextualizar y tener una mirada de futuro educacional. Pero como todo desafío, significa sobrellevar obstáculos, dificultades y resistencias. La educación ha evitado históricamente la controversia. Así, es necesario sensibilizar a las escuelas y capacitar a los docentes.
*Abraham Magendzo K.
Chileno. Doctor en Educación, Universidad de los Ángeles California (UCLA), EUA. Director Académico del Doctorado en Educación, coordinador del Equipo de Curriculum, Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC), Chile; coordinador de la Cátedra UNESCO en Educación en Derechos Humanos. Temas de investigación: curriculum, educación en Derechos Humanos, educación en ciudadanía, violencia escolar. magendzoabraham14@gmail.com Regresar
Apple, M. (1986), Ideología y currículo, Madrid-España, Ediciones AKAL.
Barton, B. (1997), Teniendo el sentido de la etnomatemática, New Zealand, The University of Auckland.
Díaz-Barriga, A. (2003), “Conceptualización de la esfera de lo curricular”, en A. Díaz Barriga (coord.), La investigación curricular en México. La década de los noventa, México, Consejo Mexicano de Investigación Educativa (COMIE) (La Investigación Educativa en México, vol. 5), pp. 33-61.
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Freire, P. (1985), Pedagogía del oprimido, Montevideo/México, Tierra Nueva/Siglo XXI Editores.
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Magendzo K., Abraham (2021), “Un currículum controversial-problematizador: un desafío para la educación de América Latina”, Revista Iberoamericana de Educación Superior (RIES), vol. XII, núm. 34, DOI: https://doi.org/10.22201/iisue.20072872e.2021.34.988 [consulta: fecha de última consulta].